El dinero sigue muy barato

Los mercados de renta variable europeos se anotaban subidas generalizadas, en una semana con todos los focos centrados en la publicación de resultados empresariales del primer trimestre de 2018. En relación con la política, se producían las visitas de Macron y Merkel a Trump, en las que los mandatarios europeos trataban de persuadir al líder norteamericano en la permanencia de EE.UU. en el acuerdo post nuclear con Irán, así como en la reducción de aranceles a China con el fin de evitar una guerra comercial.

Quiero mencionar, en lo relativo a los bancos centrales, que tuvo lugar la reunión del Banco Central Europeo (BCE), en la que no se producía ninguna sorpresa. El BCE cumplía el guión manteniendo la hoja de ruta. En la reunión del BCE del jueves, el comité no discutía sobre los pasos a dar en cuanto a política monetaria, y se centraba en analizar la reciente moderación en los datos macro e indicadores de confianza, si bien el BCE se muestra confiado sobre la transitoriedad de los mismos y la solidez económica, gana tiempo de cara a anunciar el final de los programas de compras. El BCE ve ralentización en el crecimiento y por ello, mantiene tipos en el 0%. Con esto, puede afirmarse que el dinero no sólo sigue barato, sino prácticamente regalado. El presidente del BCE, Mario Draghi alertó de «una moderación del crecimiento económico de la zona del euro», aunque sigue siendo «sólido y amplio», si bien hay riesgos por el proteccionismo. Además, el consejo de gobierno del BCE mantuvo el plan de compra de deuda pública y privada del área ante las señales de ralentización de la economía del área monetaria.

Por su parte, el BoJ mantenía sin cambios sus actuales políticas monetarias pero eliminaba de su discurso el timing para alcanzar el objetivo de 2% de inflación que se había marcado anteriormente en el año fiscal 2019. Se espera por tanto que las previsiones de inflación de la autoridad monetaria se revisen a la baja en los próximos meses.

Respecto a la macro, los datos continuaban señalando una relativa reducción del crecimiento. Por otro lado, en los mercados de deuda, la TIR de deuda soberana de EE.UU. a diez años volvía a superar el 3% después de 4 años. A nivel sectorial, lideraban las subidas que se producían en el sector retail, en el energético y utilities, los cuales eran impulsados por los altos precios del crudo, así como el tecnológico, el cual era apoyado por los buenos resultados de grandes compañías del sector.

A nivel doméstico, considero que lo más destacable es que en España, el gobierno conseguía los apoyos suficientes para continuar con los presupuestos generales del estado. Y es, sin duda, una gran noticia. El apoyo se logró con el acuerdo en el incremento de las pensiones. La pensión media subirá 14,5 euros para los jubilados y 25 para las viudas durante 2018. El acuerdo del Gobierno y el PNV aparca dos años el factor de revalorización ya en duda, pero los técnicos de Hacienda advierten sobre el déficit. Los jubilados han ganado la batalla. Al menos para los próximos dos años. El Gobierno ha aceptado –a cambio del apoyo del PNV a los Presupuestos– subir todas las pensiones con carácter general un 1,6% en 2018 –con efecto retroactivo– y también en 2019, en línea con la evolución de los precios. El triunfo ha sido doble, porque ya no puede dar marcha atrás y la revalorización de las prestaciones mínimas y las no contributivas se mantendrá en el 3% anunciado. E incluso hay una tercera victoria, en este caso para las viudas, pues su base reguladora se elevará dos puntos por encima de lo pactado hasta el 56% este año y llegará al 60% el próximo.

Considero, amable lector, que es preciso tener en cuenta la siguiente cuestión: ¿cuánto dinero supondrá esta nueva subida para el bolsillo de los diferentes colectivos? Puesto que desde el 1 de enero ya se revalorizaron un 0,25% –el mínimo legal–, que apenas significó de media 2,3 euros más al mes, habría que incrementar la prestación otro 1,35%. Como la pensión media del sistema –que incluye las prestaciones por incapacidad permanente, jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares– ascendió en abril a 934,6 euros mensuales, ese 1,35% más supondrá 12,6 euros extra al mes, situándose así en 947,2 euros.

Por otro lado, el déficit del Estado se reduce un 14,4% en el primer trimestre. El desfase entre ingresos y gastos de la administración central se sitúa en el 0,37% del PIB gracias a la mayor recaudación. El déficit público del Estado mantuvo su senda descendente en el primer trimestre del año. El objetivo para este año de la administración central es del 0,7%, aunque en la comunicación enviada por el Gobierno a Bruselas se eleva al 1,2%.La reducción del déficit del Estado se debe en gran medida al incremento de los ingresos tributarios un 8,5% hasta los 40.731 millones en términos de contabilidad nacional. Hay que tener en cuenta que la previsión del Gobierno es que la recaudación este año alcance la cifra récord de 210.000 millones debido a la mejora de la economía.

En el caso del IRPF la recaudación alcanzó en los tres primeros meses del año los 10.661 millones, lo que supone un alza del 7,8%. En este caso, las retenciones del trabajo mejoran un 6% debido a la mejora del empleo. Por su parte, los ingresos del Impuesto sobre Sociedades aumentan desde los 713 millones en 2017 hasta 1.513 millones en 2018. El IVA también registró un crecimiento del 7,4%. El lado de los gastos también se elevó un 5,9% hasta los 49.822 millones. Un incremento de las transferencias a otras administraciones públicas en un 4,9% (principalmente comunidades autónomas y corporaciones locales). Asimismo, aumenta ligeramente la remuneración de asalariados en un 0,4%. Además, Hacienda también ha publicado los datos correspondientes al déficit de las administraciones públicas (salvo ayuntamientos) hasta febrero. En concreto, se situó en los 9.955 millones, lo que equivale al 0,82% del PIB, un 10,2% menos que en el mismo periodo del ejercicio anterior. En el caso de las comunidades autónomas disminuye su déficit hasta el 0,05%, una cifra inferior al 0,12% del año anterior. El objetivo oficial es del 0,4% aunque el Gobierno ha remitido a Bruselas un déficit del 0,2%. Si se analiza de forma individual, hasta ocho regiones cerraron febrero con superávit (Andalucía, Asturias, Canarias, Galicia, Murcia, Navarra, Comunidad Valenciana y País Vasco).

Como asturiana, celebro que Asturias sea una de ellas. Desde Hacienda explican que este buen comportamiento se basa en parte en las mayores transferencias del Estado por el sistema de financiación. Por último, los fondos de la Seguridad Social acabaron los dos primeros meses del año con un superávit del 0,12%. En cualquier caso, el objetivo para este año es que el sistema acabe en el 1,1%, aunque el Gobierno ya ha reconocido que será del 1,4%, es decir, un agujero similar a los 17.000 millones del año pasado.

A nivel bancario me parece muy importante destacar que la competencia por las hipotecas lleva el interés medio al 2,66%, el más bajo de la historia. La firma de préstamos para vivienda vuelve a acelerarse en febrero al crecer un 13,8%. Los datos del INE confirman las conclusiones del Banco de España sobre la relajación de las condiciones de financiación. La banca ha vuelvo a relajar las condiciones de acceso a las hipotecas en el primer trimestre de 2018. Fue una de las conclusiones de la última ‘Encuesta sobre Préstamos Bancarios’ del Banco de España publicada estos pasados días. Y los datos de firma de hipotecas dados a conocer esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE) vienen a confirmarla. Y es que el tipo de interés medio de los préstamos concedidos para la compra de vivienda se situó el pasado mes de febrero en el 2,66%, el nivel más bajo de toda la serie histórica. La razón no es otra que el afán de la banca por captar clientes hipotecarios, lo que le ha llevado a hacer cada vez más competitivos los precios de las hipotecas, tanto fijas como variables. Así, el interés medio es un 15,3% inferior al de febrero de 2017, cuando era del 3,13%. Hay que remontarse a octubre de 2017 para encontrar un tipo similiar, cuando se situó en el 2,67%. En el caso de las hipotecas variables, el tipo medio al inicio es del 2,47%, un 20,4% menos, y en las hipotecas fijas es del 3,05%, un 4,7% menor.

Por último, quisiera referirme a un hecho destacado: las Cajas Rurales anuncian su fusión fría para blindarse ante posibles riesgos financieros

De lo que se trata es de cubrir de manera regulada un fondo para disponer de él en caso de imprevistos, algo que ya hacían de manera voluntaria. 29 de las Cajas Rurales del país, entre las que figuran las de Gijón y Asturias, han acometido ya el proceso de fusión fría, como se conoce popularmente a su inclusión en el Sistema de Instituciones de Protección (SIP). El presidente de Caja Rural de Asturias, José María Quirós, adelantó el pasado mes de febrero en el programa La Lupa de Canal 10 la adhesión de las dos Cajas Rurales asturianas a este proceso, una medida preventiva para minimizar posibles riesgos: la idea es crear un fondo para que esté vigente como complemento del fondo de garantía de depósitos y atender las necesidades de las entidades.  El fondo creado es de 300 millones de euros y con él se pretende tanto minimizar posibles desajustes de cuentas como problemas financieros que pudieran surgir en cualquiera de las entidades. Cada Caja mantendrá su independencia y las decisiones serán reguladas por sus respectivos consejos de administración como ha venido siendo hasta ahora, aunque «todas van a vigilarse unas a otras».

Suscribo la anterior afirmación, que pertenece al presidente de Caja Rural de Asturias, y pienso que es bueno que sirva para un mutuo control pero manteniendo su autonomía.

SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA ASOCIADA A LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.