En esta semana, a nivel de política monetaria, el BCE señala que una primera subida de tipos de interés en julio sin haber evaluado el crecimiento económico del segundo semestre de 2022 y analizado completamente como podría evolucionar la economía sería imprudente según Fabio Panetta, miembro del Consejo. Por otro lado, el economista jefe del BC Philip Lane quitaba presión al Consejo al comunicar que el carácter «Front-loaded» de las revisiones salariales (incrementos salariales superiores en 2022 vs 2023) sugiere que empresas y sindicatos consideran que parte de la mayor presión en precios es de carácter temporal.
Muy importante señalar que en China sigue escalando la preocupación por el impacto que las medidas de contención ligadas a las políticas de covid cero tienen en la economía. Al tiempo se dispara la expectación de que este fin de semana pueda anunciar medidas fiscales para paliar el impacto.
En el Reino Unido y a nivel político se presentaron los resultados de las elecciones locales que daban un fuerte varapalo al partido conservador, que perdía circunscripciones clave e históricamente conservadoras, lo que se lee como un voto de castigo, por la elevada inflación y también por el «partygate».
En el tema del petróleo, el Brent acumula una subida semanal del 2% apoyada en el debate en la UE sobre la prohibición de importaciones del crudo ruso, limitando también el transporte y el seguro de esta commodity.
- Al otro lado del charco, dos titanes de Wall Street estaban disparados más del 220% y parece que seguirán al alza. En el índice Nasdaq de EEUU existen dos joyas de inversión que ganan hasta un 220% este ejercicio. Gustan a todos los expertos que les siguen y les auguran un nuevo rally de hasta el 190%. Las Bolsas internacionales no están pasando un buen momento y cotizan en rojo desde el inicio de enero. Pero hay un claro perdedor este 2022: el índice tecnológico de Estados Unidos, Nasdaq registra un descenso del 20% anual.
A nivel doméstico, cabe señalar que uno de cada seis hogares cambió de compañía eléctrica en 2021. El alza de los precios de la luz incrementó un 40% los intercambios frente al año anterior | En el caso del gas, los movimientos entre compañías se elevaron un 30% en el periodo. En efecto, casi uno de cada seis hogares españoles se cambió de compañía eléctrica en 2021. En total, cinco millones de usuarios, de los 29 millones que hay en total, mudaron de empresa en un año en el que los precios de la luz en el mercado mayorista triplicaron la media histórica de 40 euros por megavatio-hora. El incremento de esta actividad de intercambio –del 37%, en comparación con 2020— no tiene precedentes en años anteriores. En 2018, 3,2 millones de usuarios mudaron de compañía, y en 2019 hicieron lo propio 2,9 millones. Eso es lo que se extrae de los datos de la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia).
También merece la pena destacar que las comunidades turísticas salvan el PIB español. Las regiones turísticas contribuyen a mantener en positivo el exiguo crecimiento nacional, del 0,3% en el primer trimestre, pese al retroceso de la actividad en dos comunidades autónomas y su congelación en Andalucía y La Rioja. La fuerte desaceleración protagonizada por el PIB español en el primer trimestre del año, que pasó de crecer un 2,2% a solo un 0,3% en tasa inter-trimestral según el dato provisional publicado el viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se ve aliviada por esta circunstancia.
Por otro lado, la recaudación de Hacienda bate récord: se dispara un 20% por la inflación.
La Agencia Tributaria admite que el alza de precios ha elevado los ingresos por IVA e IRPF, al impulsar una subida salarial del 2,5%. La recaudación del primer trimestre llega a cotas inéditas y supera en 10.000 millones la de 2021.
Por otra parte, el Gobierno tiene 59 días para asignar 8.550 millones en rescates a empresas. Solo ha repartido el 22% de los 11.000 millones presupuestados. La SEPI prevé que tendrá tiempo para resolver 35 solicitudes. El 30 de junio de 2022 es la fecha límite marcada por Bruselas para que el Ejecutivo pueda seguir concediendo ayudas públicas a las empresas a través del Fondo de Solvencia para Empresas Estratégicas, gestionado por la SEPI, y del Fondo de Recapitalización de empresas afectadas por la COVID-19, gestionado por Cofides. Ambos cuentan con una dotación de 11.000 millones, de los que solo se han gastado hasta el momento 2.450 millones, lo que supone apenas un 22% del presupuesto. Dicho de otra manera quedan 8.550 millones sin repartir y ambos organismos solo cuentan con 59 días para poder asignarlos. El fondo de la SEPI contaba con una dotación inicial de 10.000 millones de euros, de los que por ahora solo se han desembolsado 2.125 millones en 19 operaciones, lo que apenas representa un 21% del total, mientras que el gestionado por Cofides contaba con una dotación inicial, de los que ya se han repartido 325 millones entre 33 empresas, un 33% del total.
Yendo a lo que destaco en el titular del blog en el día de hoy, se da una gran paradoja del trabajo en España: 3,1 millones de parados y 109.000 ofertas de empleo sin cubrir. El sector servicios tiene 95.000 puestos sin cubrir. El reto demográfico y una formación que no se ajusta al mercado laboral explican parte del problema. La ministra de Trabajo reconoce que existe «inquietud» y convocará a los agentes sociales para abordarlo. Desarrolladores web experimentados, especialistas en inteligencia artificial, mozos de almacén que sepan manejar robots, montadores de fachada técnica en promociones inmobiliarias… El mercado de trabajo está en constante evolución pero tiene síntomas muy extraños nuestro mercado de trabajo español. Para incrementar la rareza, aunque todos somos conscientes de ello, se ha dado un récord de absentismo: las bajas cuestan 39.000 millones a las empresas. ¿Cómo es posible que esto suceda en un país con semejante récord de parados? Es un contrasentido absoluto. En 2021 se perdieron 1.800 millones de horas de trabajo sólo en el sector privado, lo que significa que uno de cada 16 trabajadores no acudió a su puesto cada día del año. La pandemia del coronavirus ha supuesto un fuerte impacto para las empresas por varias vías, que incluyen el cierre total de las actividades no esenciales durante algunos días en 2020.
A nivel bancario, comentar que empieza a darse la posibilidad de tener depósitos con una rentabilidad del 1% para los ahorros. Los mejores intereses para suavizar el golpe de la inflación se encuentran en las entidades extranjeras. El dinero en depósitos continúa creciendo. Roza los 974.000 millones de euros, según los últimos datos del Banco de España correspondientes a marzo. La cifra es un 5,5% superior a la de hace un año. Los españoles siguen confiando en este producto de ahorro sin riesgo, que actualmente ofrece rentabilidades algo por encima del 1% en el mejor de los casos. Aunque ni de lejos consiguen batir la elevada inflación, que se sitúa en el 8,4%, sí permiten suavizar la pérdida de poder adquisitivo. En España, los intereses medios de los depósitos a plazo fijo son del 0,01% hasta un año, del 0,39% entre más de un año y hasta dos años, y del 0,03% en más de dos años. Apenas se atisban mejoras de las rentabilidades en el corto plazo, aunque sí empezarán a ser algo más atractivas conforme suban gradualmente las tasas rectoras. Estiman que, salvo ofertas puntuales, no se verán cambios significativos antes de 2023.
También, a nivel bancario, comentar que la gran banca contiene la morosidad a la espera de un impacto por los créditos ICO. En el último año los bancos logran bajar la ratio de morosidad. Se estima un repunte de los impagos hasta el 4,6% para 2022. Los grandes bancos españoles encaran un trimestre decisivo para conocer el impacto de posibles impagos en sus carteras de crédito por la pandemia del Covid-19. Aunque el golpe del virus a la economía se produjo hace prácticamente dos años, el balance de los bancos todavía no ha registrado un deterioro por los préstamos concedidos con el aval del Instituto de Crédito Oficial (ICO) debido a las medidas de alivio para empresas y autónomos Es decir, hasta ahora el grueso de los beneficiarios de estos créditos solo pagaban los intereses. Esta medida se puso en marcha con la intención de que en este tiempo recuperasen sus niveles de facturación y eso les permita cumplir con las obligaciones de pago de forma más cómoda Sin embargo, tanto las entidades como el Banco de España cuenta con un repunte de la morosidad a partir del segundo trimestre del año. Debido a la normalización de la actividad económica, las medidas de contención han ido cesando paulatinamente y se espera que la mayor parte de las carencias vigentes para los créditos avalados por el ICO venzan entre abril y junio. Será el momento de tomar el pulso a la capacidad de pago de las empresas.
A nivel local, la industria asturiana frenó su avance hasta el 2,6% en marzo por el paro de camioneros. Sadei ve signos positivos para que se recupere la pujanza | El PIB asturiano superó la media anual del país en el primer trimestre. El paro patronal de camioneros del pasado mes de marzo –que fue más intenso y prolongado en Asturias que en la generalidad del país– golpeó a la industria regional ralentizando de modo abrupto su tendencia expansiva, según la Sociedad Asturiana de Estudios Económicos e Industriales (Sadei). El sector fabril asturiano avanzó en marzo el 2,6% en tasa interanual frente al 8,92% en que lo había hecho en febrero, cuando aún mantenía una tendencia pujante pese al alza de los costes energéticos y de los precios de las materias primas y al estallido de la guerra en Ucrania el 24 de ese mes. El crecimiento acumulado por la industria regional en el primer trimestre es del 9,6%.
También aquí, en el Principado, las matriculaciones de turismos y todoterrenos cayeron el 28,1% en abril en Asturias en comparación con el mismo mes de 2021, con 799 unidades, con lo que el descenso acumulado en lo que va de año se sitúa en el 34,2%, con 3.983 vehículos frente a los 6.060 del primer cuatrimestre del pasado ejercicio. A nivel nacional, la cifra de matriculaciones se redujo el 12,1% en abril en comparación con el mismo mes del año anterior, y el 11,8 % en el cuatrimestre. Estos es indudablemente una mala noticia porque es un termómetro de la actividad económica y la confianza del consumidor, que a nivel local, ya vemos que es reducida.
SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.