Remiendos de 300 euros

Esta semana ha tenido un tono positivo en las bolsas europeas, tras las fuertes caídas registradas la semana pasada después de que la FED anunciase una subida de tipos de 75 puntos básicos. El IBEX repuntaba un +1,2% durante la semana. Por sectores europeos, los más perjudicados continúan siendo recursos básicos (-4.9%) y automoción (-1,6%) mientras que el sector tecnológico registraba un muy buen comportamiento semanal (+5,4%).

A nivel geopolítico. el pasado miércoles 23 arrancaba la Cumbre Europea, donde finalmente Ucrania y Moldavia se convertían en candidatos para entrar a la Unión Europea, dando paso a un proceso de expansión al Este no exento de riesgos. En cuanto al conflicto bélico, Rusia mantiene bloqueadas las líneas de exportaciones alimentarias mientras que EE. UU. anunciaba un nuevo envío de ayuda militar a Ucrania por valor de 450 M.$ en el que se incluyen sistemas de misiles de alcance medio. Cabe destacar que las presiones sobre el primer ministro, Boris Johnson, aumentaban tras la nueva derrota electoral de los conservadores en las elecciones parciales celebradas el pasado jueves día 23. Por su parte, comienza a verse cómo la inflación y las movilizaciones están impactando en la confianza del consumidor que cae a mínimos de 40 años. Asimismo, los datos de ventas minoristas de mayo arrojaban una caída, si bien, algo menor a la esperaba por el mercado.

En términos de política monetaria, la Fed insiste en su compromiso para combatir la inflación. El banco central estadounidense anunció la semana pasada una subida de los tipos de interés de 75 puntos básicos lo que no ocurría desde hace 28 años para luchar contra una inflación del 8,6%. El presidente de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, Jerome Powell, adelantó esta pasada semana que el organismo mantendrá su política de subidas de los tipos de interés aun a riesgo de que el país entre en una recesión, un escenario que no descartó.  En una comparecencia ante un comité del Senado de EEUU, Powell aseguró que un «aterrizaje suave» de la economía sigue siendo el objetivo de la Fed (es decir, una bajada de la inflación que afecte en lo mínimo la actividad económica), pero admitió que este escenario es cada vez «más difícil». «Este objetivo ha pasado a ser significativamente más difícil por los hechos acontecidos en los últimos meses«, señaló Powell.

A nivel doméstico, destacar que la economía solo creció 2 décimas en el primer trimestre. El crecimiento de la economía durante el primer trimestre del año se quedó en un débil 0,2%, lo que supone una décima menos del dato anticipado y un frenazo respecto al ritmo que había tomado la recuperación. Se confirma por tanto el enfriamiento de la economía. Del crecimiento del 2,6 del tercer trimestre del año pasado se redujo al 2,2 en los últimos tres meses y ahora, se frena hasta solo un 0,2. Es una caída provocada en buena parte por el freno en el consumo. Cae el consumo en los hogares un 2% en relación con el trimestre anterior. Supone un retroceso cuando llevaba tres períodos consecutivos incrementándose y alimentando el motor económico. Sin embargo, es una caída menor de la que preveía el dato adelantado que la situaba en un 3,7%. El crecimiento del primer trimestre del año se ha visto lastrado de forma ostensible por tres factores. Por un lado, el impacto de la variante ómicron sobre las actividades de ocio. Además, la invasión de Ucrania el 24 de febrero provocó consecuencias económicas que afectaron no solo los primeros meses del año, sino que las seguimos sufriendo ahora y previsiblemente en el futuro inmediato. Un tercer factor fue la huelga de transportes de mediados de marzo que tuvo un impacto notable en las cadenas de suministro. Con relación a los datos adelantados del INE hay dos grandes cambios. Por un lado, la caída del consumo privado es mucho menor, casi la mitad. Se queda en un 2% cuando antes se preveía un 3,7%. La segunda gran corrección es una menor recuperación del turismo, del gasto de los extranjeros en España. Con los datos adelantados, suponía que en el primer trimestre ya se habían recuperado los niveles de ocupación turística de la etapa pre-pandemia. Ahora el aumento del consumo final de los no residentes se queda en un 5,2 cuando el dato adelantado lo fijaba en un abultado 21,9%.

Una noticia relevante a nivel empresarial: Indra se desploma en Bolsa tras los cambios en su consejo. La junta de accionistas aprobó el cese de cinco consejeros independientes y nombró a Jokin Aperribay como consejero dominical de Sapa. El presidente de la CNMV tilda de «llamativa y preocupante» la salida de los consejeros. Se produjo además un viernes negro para las acciones de Indra que reaccionan con fuertes caídas a los cambios aprobados. Sus títulos se hunden un 15% en Bolsa después de que la junta de accionistas de la compañía diera luz verde al cese inmediato de cuatro consejeros independiente, la no renovación de Isabel Torremocha (también independiente) y el nombramiento de Jokin Aperribay como consejero dominical de Sapa Placencia, el tercer mayor accionista de la tecnológica solo superado por la SEPI, con más de un 25% del capital, y Fidelity, con más del 11%. El mercado no ha hecho una buena lectura de estos cambios a la vista de la reacción en Bolsa.  Con el cambio de control se abren muchas incertidumbres. Entre ellas, la capacidad de gestión del nuevo equipo directivo, la idoneidad de realizar adquisiciones (ahora con la capacidad de emitir hasta 1.500 millones de euros en instrumentos de renta fija) y la posible venta de Minsait o la respuesta del creciente número de inversores que cada vez le dan más importancia a los criterios ESG en sus decisiones de inversión.  También es posible que la CNMV obligue a la SEPI a lanzar una opa por el 100% de Indra alegando acción concertada entre accionistas liderados por la SEPI y apoyados por Sapa y Amber, cuya participación conjunta supera el 30%.

A nivel bancario, De Guindos pide prudencia a los bancos: “No nos ceguemos con la ilusión de subidas de tipos a corto plazo”. El vicepresidente del Banco Central Europeo señala un escenario complicado por la inflación y el contexto de desaceleración económica. El vicepresidente  ha pedido prudencia a los bancos ante la alta inflación. Pese a la próxima subida de tipos, que se ejecutará a partir del mes de julio y que se ha recibido como un balón de oxígeno en el sector bancario, el supervisor europeo apunta a un escenario de desaceleración económica y de mayor dificultad para empresas y familias de hacer frente a los pagos. «Los bancos tienen la parte positiva de que los ingresos subirán, pero hay una desaceleración económica y un contexto de dificultades para hacer frente al endeudamiento. Seguramente la morosidad va a subir y va a haber más dificultades para empresas y familias en el contexto de alta inflación. Por eso es importante que los bancos sean prudentes. El supervisor pide prudencia y está especialmente justificado. No nos ceguemos con la ilusión de subidas de tipos a corto plazo», explicó Guindos. En ese sentido, durante su intervención en unas jornadas económicas organizadas por la APIE junto a la Universidad Menéndez Pelayo y BBVA, el vicepresidente del BCE instó a los bancos a que «continúen con niveles de provisiones adecuados». El exministro español detalló que el escenario central que maneja el BCE es de una desaceleración económica y de la inflación tras el verano. También puntualizó que hay «muchísima incertidumbre» y se ha plantado un escenario adverso de recesión en 2023.

Por otro lado, Guindos subrayó que una de las preocupaciones del BCE es evitar la fragmentación de los mercados europeos para extender la política monetaria «adecuadamente». En ese sentido, el vicepresidente del BCE expresó que espera que el nuevo mecanismo que prepara el supervisor logre paliar las divergencias «indeseadas» entre las primas de riesgo. «La fragmentación implica que una familia o una empresa en España, en Italia o en otro país vulnerable y que es igual de solvente que en otros países tiene que pagar más por su endeudamiento como consecuencia del país donde está ubicada. Eso implica que los impulsos de política monetaria no se extienden adecuadamente. Suele empezar con las primas de riesgo y se extiende a todos los mercados de crédito y renta fija y pone en riesgo el proceso de transmisión de política monetaria y estabilidad financiera», ha destacado. De este modo, ha explicado que se trata de un instrumento «contra la fragmentación indeseada» y cuyo objetivo es liberar a la política monetaria para actuar con más contundencia». El BCE evita ponerle techo a la subida de los tipos. Guindos afirma que el nuevo instrumento para evitar las escaladas de las primas de riesgo será «bastante diferente» al de 2012. El vicepresidente del BCE ha evitado precisar hasta qué nivel podría subir los tipos de interés oficiales su institución para tratar de frenar la espiral inflacionista ¿Hasta dónde podemos llegar? No lo sé. Y si alguien se lo dice, no le crea mucho», ha contestado a una pregunta recibida durante su intervención en un curso organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y la Universidad Menéndez Pelayo. En los últimos meses, varios miembros del consejo de gobierno de la autoridad monetaria han dejado entrever que los tipos de interés podrían subir hasta el nivel conocido como natural o neutral, es decir, aquel que no implica una política monetaria ni expansiva ni restrictiva. La discusión está en cuál es dicho nivel. Para el gobernador del BE Pablo Hernández de Cos, estaría en torno al 1% o un poco por encima, pero otros gobernadores lo ven más cercano al 2%. «Si le pregunta a cien economistas tendrá cien respuestas distintas», ha ironizado De Guindos.

Temor a un frenazo súbito de la economía tras el verano. La escalada de tipos supondrá un sobrecoste para la deuda pública de 5.500 millones.  Una vez agotado el efecto positivo de la demanda turística embalsada, la economía se enfrenta a un otoño muy complicado. Por un lado, el consumo quedará lastrado por la subida de precios y el aumento de las cuotas hipotecarias. Por otro, la inversión se resentirá por las malas expectativas empresariales y los costes de refinanciación de la deuda. Junto a ello, un posible recorte de gasto público o una subida de impuestos daría la puntilla al crecimiento. Hace unos meses se hizo muy famosa una frase de Pedro Sánchez en la que señalaba que los españoles pagarían lo mismo por el recibo de la luz en 2021 que en 2018, pero «descontando la inflación». Y algo similar pasa con la economía nacional y mundial.  

De nuevo, a nivel empresarial, destaco una noticia: El Corte Inglés avanza hacia un capital estable y español con la salida a Bolsa de fondo. El Corte Inglés ha experimentado en los últimos meses el mayor número de movimientos accionariales que se le recuerdan. Entre octubre y junio se ha aliado con Mutua Madrileña para que la compañía aseguradora tome el 8% del capital; amortizó un 6% de autocartera para elevar la participación de los accionistas ya presentes en el mismo; y esta pasada semana anunció la recompra de la mitad de las acciones de Primefin, el inversor catarí que pasa a ostentar apenas un 5,53% del grupo y que enfila su salida definitiva. El Corte Inglés, que tiene en marcha una profunda revisión de su negocio, también transforma su estructura de capital con la salida a Bolsa de fondo. Un compromiso adquirido, aunque no obligado, con Mutua Madrileña con un horizonte a cinco años. El fichaje de Santiago Bau, un experto en este tipo de operaciones, como uno de los directores generales del grupo, no suena casual. Estos cambios en el accionariado van en la línea de lo que busca el grupo: socios institucionales, y no oportunistas, con vocación de permanencia a largo plazo y que apuesten por el crecimiento del grupo. Y de paso, que abran oportunidades recíprocas de negocio. El caso de Mutua es paradigmático, con el añadido del componente de gran empresa nacional que ve futuro en El Corte Inglés. Algo que no siempre ha estado tan claro con Primefin, la sociedad bajo la que el jeque Al Thani controlaba hasta ahora el 11,07% del grupo. Este entró en 2015 con una inyección de 1.000 millones en forma de crédito participativo que, a los tres años, se convirtió en acciones. Una bombona de oxígeno financiero en un momento en el que El Corte Inglés intentaba recuperar la senda del crecimiento, tras sufrir de manera directa los efectos de la crisis financiera: entre 2007 y 2013 perdió el 20% de sus ventas y el 70% de sus beneficios. El préstamo se convirtió en el 10% del capital del grupo en 2018, y entonces Primefin tuvo que elegir: recibir los intereses de su préstamo en más acciones o en efectivo. Eligió lo segundo, muestra de una apuesta a medias por el futuro de El Corte Inglés. Además, ha decidido salir del consejo de administración de la compañía, donde podía permanecer pese a reducir a la mitad su participación. Desde el propio grupo de distribución todavía se observaba la presencia de Primefin en el capital como el fruto de una deuda y no de un compromiso de futuro. La recompra de ese 5,53%, y la que llegará de la otra mitad que todavía ostenta el inversor catarí, manda al mercado otro mensaje sobre el pulmón financiero que la entrada de Mutua y la refinanciación de febrero han dado a El Corte Inglés: solo este año se ha quitado dos emisiones de bonos por más de 1.200 millones de euros y ha amortizado un préstamo ICO por 390 millones. Esfuerzos todos ellos dirigidos a aligerar el pasito y obtener el ansiado grado de inversión, que demostraría a ojos del mercado que El Corte Inglés, al menos a nivel financiero, está preparado para una salida a Bolsa.

En lo que destaco en el titular del blog en el día de hoy, Yolanda Díaz plantea un cheque de 300 euros para las personas «más golpeadas por la crisis». La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha propuesto elevar la tasa del Impuesto sobre Sociedades en 10 puntos a las «grandes empresas energéticas» con el objetivo de elevar la recaudación. Personalmente, creo que no es más que parche que servirá de poco.

Por su parte, Montero pretende aplicar el recargo fiscal a las eléctricas al inicio de 2023. Hacienda trabaja para que este recargo se aplique sobre «un rendimiento real» porque «a veces el vehículo del impuesto de sociedades no es el que aporta el mayor rendimiento» La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido que es «de justicia» que las grandes eléctricas  «paguen una mayor parte» en impuestos porque han tenido más beneficios y ha abogado por implementar este recargo tributario al inicio del próximo ejercicio fiscal, que arranca el 1 de enero. Montero se ha mostrado de acuerdo con el «contenido y objetivo» de este recargo tributario, aunque ha discrepado con los detalles de la propuesta de la vicepresidenta de Trabajo, de fijar un recargo de diez puntos sobre el impuesto de sociedades -que tiene un tipo del 25% salvo para banca y petroleras, que es del 30%.

Finalmente, un dato curioso: dimiten los dos secretarios de Estado de Escrivá; Seguridad Social y Migraciones. Escrivá nombrará como sustitutos de Arroyo a Borja Suárez, al frente de la Seguridad Social, y a Isabel Castro en el lugar de Perea en Migraciones. El secretario de Estado de Seguridad Social, Israel Arroyo, mano derecha del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá ha dejado su cargo por motivos personales. Asimismo, abandonará también su cargo el otro secretario de estado de Escrivá, que está al frente de Migraciones, Jesús Perea. Perea volverá al equipo de Moncloa, donde estaba antes de este puesto y será sustituido por Isabel Castro. Arroyo, que ha liderado las numerosas negociaciones llevadas a cabo por la Seguridad Social en el diálogo social para la reforma de las pensiones o del sistema de cotización de autónomos, será sustituido por el actual número tres de este área, Borja Suárez, que hasta ahora ocupaba el cargo de Director de Ordenación de la Seguridad Social.

Demasiados movimientos en un solo ministerio, que no dejan de resultar un tanto sospechosos. Que sean para bien.

  SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.