Noviembre cierra cumpliendo su estacionalidad positiva, con una rentabilidad por encima de lo esperado. Quedará como uno de los mejores noviembre del ciclo. También ha sido el mejor noviembre desde 2008 para el mercado de bonos, en buena parte responsable de la positiva evolución de las bolsas. Esto facilita el camino a diciembre, que es el tercer mes en cuanto a rentabilidad se refiere, después de haber perdido la hegemonía frente a abril y noviembre tras el fatídico diciembre de 2018, cuando se apuntó un retroceso del -9,18%. La rentabilidad promedio de diciembre se sitúa en el +1,45% para el S&P 500 en el periodo desde 1950 hasta el pasado 2022. Sí que mantiene el liderazgo como el mes del año que más veces cierra en positivo en este periodo, en 54 ocasiones de las 73, lo que equivale a un 73,97%, frente a tan solo 19 cierres en negativo, un 26,03%.
Lo que destaco como titular del blog en el día de hoy es que Trump amenaza con imponer aranceles a México, Canadá y China desde el primer día de su nuevo mandato. 20 días después de su victoria electoral y casi dos meses antes de llegar formalmente a la Casa Blanca Donald Trump ha lanzado esta pasada semana la primera salva de la guerra de aranceles que prometió en su campaña. Con dos mensajes en Truth Social, el presidente electo de Estados Unidos ha especificado la amenaza de aranceles a todos los productos de México, Canadá y China si no frenan la inmigración y el tráfico de fentanilo. El anuncio de Trump habla de gravámenes del 25% a todos los productos de México y Canadá, que advierte que autorizará por orden ejecutiva el primer día de su mandato y estarán en vigor “hasta que se detenga la invasión del país de drogas, en particular del fentanilo, y de inmigrantes ilegales”. El segundo mensaje promete la imposición de aranceles del 10% a China que se sumarán a los que ya se imponen a importaciones del gigante asiático, al que ha acusado de no combatir con suficiente contundencia el narcotráfico de los precursores del fentanilo. Trump siempre ha defendido usar los aranceles como una herramienta de negociación y puede que los mensajes de esta pasada semana entren en esa estrategia pero también cabe la opción de que, en una tendencia cada vez mayor hacia el proteccionismo, se materialicen. En cualquier caso ya han sacudido los mercados, han hecho que caiga la cotización del dólar canadiense y el peso y han desatado la primera tormenta diplomática de Trump incluso antes de que vuelva a Washington. Justin Trudeau, el primer ministro canadiense, ha llamado a Trump tras la publicación y los dos han hablado en una conversación de casi dos horas de “comercio y seguridad fronteriza”. Un portavoz de la embajada china en EEUU ha dicho en un comunicado en X que la cooperación económica y comercial entre los dos países es “mutuamente beneficiosa” y ha advertido: “Nadie ganará una guerra comercial o una guerra de aranceles”.
Un golpe cuádruple
México, Canadá y China son los mayores socios comerciales de EEUU y en conjunto representan un tercio de todas las importaciones y exportaciones del país. El valor de las exportaciones estadounidenses a los tres el año pasado superó el billón de dólares y EEUU por su parte importó de ellos bienes y servicios por más de 1,5 billones. Según datos del censo, este año el 42% de las importaciones a EEUU provenían de los tres países. En el caso de México y Canadá, que envían cerca del 80% de sus exportaciones a EEUU, los aranceles representarían un durísimo golpe a sus economías. Y podrían representar una violación del acuerdo comercial que las tres naciones ratificaron durante el primer mandato de Trump, que forzó la negociación para actualizar el NAFTA. Los efectos de una guerra comercial se sentirían también en EEUU y no solo porque países afectados podrían responder con sus propios aranceles. Numerosos lideres empresariales y economistas ya antes del anuncio de esta pasada semana habían advertido de los peligros que representan los planes de Trump, que podrían llevar a incrementos de precios para los consumidores estadounidenses. Diversos sectores donde las tres economías están muy integradas, como la automoción, la agricultura o la alimentación, podrían verse especialmente afectados. Canadá, además, provee el 60% de todas las importaciones de petróleo que realiza EEUU.
Cambiando de tercio, la inestabilidad del cacao pone en peligro el chocolate. Costa de Marfil, primer productor mundial de esta materia prima, se está transformando en centro de iniciativas de administraciones y multinacionales como Nestlé para evitar que el consumo de sus derivados se convierta en un lujo para el consumidor.
Según la Organización Internacional del Cacao (ICCO, por sus siglas en inglés), que integra a los principales exportadores e importadores, existe un déficit de oferta de 374.000 toneladas en la temporada 2023-2024, el 11% menos respecto a la temporada anterior y que sitúa la producción mundial en 4,4 millones de toneladas. Por el contrario, se prevé que la demanda mundial aumente en casi el 5%. Y las perspectivas no mejoran. La ONU calcula que el déficit de producción de cacao puede situarse en torno a las 400.000 toneladas en la temporada que acaba de empezar, de octubre de 2024 a marzo de 2025.
Productos más caros
Con este desajuste, la cotización del cacao en el mercado de futuros de Nueva York ha subido más del 108% en el último año, alcanzando una cifra récord de 12.126 dólares por tonelada este abril.
A nivel local, destacar un par de noticias nada buenas y es que Duro Felguera afirma que no pidió preconcurso y que tiene el apoyo de sus socios mexicanos. En todo caso, la cotización ha sido suspendida por la acumulación de órdenes de venta mientras que el presidente llama a la confianza y tranquilidad de la plantilla.
Por otro lado, ArcelorMittal suspende los proyectos de hornos de reducción directa en Europa, incluido el de Gijón. La compañía considera que no se dan las condiciones para acometer la inversión, que permitiría sustituir los hornos altos por procesos verdes y mantener la condición integral de las plantas. En una comunicación pública, la multinacional europea del acero y segundo productor mundial señaló esta pasada semana que, aunque todos los países en los que se proyectaban estas inversiones “ofrecieron ayudas para la financiación de estos proyectos, con la aprobación de la Comisión Europea”, las inversiones en DRI “se basaban en la premisa de una combinación favorable de avances en el plano político, tecnológico y de mercado que facilitarían las inversiones en descarbonización ayudando a compensar el significativo aumento de costes de capital y de explotación que conllevaría esta estrategia de transición. Ello incluía la posibilidad de utilizar gas natural hasta que e hidrógeno verde resultase competitivo”.
Nada buena es la situación en nuestra comunidad para estas dos importantes empresas ubicadas en Astuiras. Esperemos que vengan tiempos mejores.
SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.