En esta semana, el vicepresidente del BCE, Luis De Guindos, indicaba que la autoridad monetaria tiene que aumentar los tipos de interés al ritmo actual (+50pb) durante un período de tiempo con el objetivo de estabilizar la inflación, y no hacerlo empeoraría las perspectivas del bloque al ser la tensión en precios uno de los factores principales de la recesión actual.
Por otro lado, en China, continúa la preocupación por la capacidad que tiene el sistema sanitario de este país para hacer frente a la pandemia. Hay además, otro pequeño signo que da el país, autorizando la «administración» de la vacuna covid alemana de BioNTech para los expatriados.
En territorio británico, aparecen los nuevos billetes del rey Carlos III.
El retrato del monarca aparecerá en el diseño de los billetes de 5, 10, 20 y 50 libras.
El dinero de Reino Unido será distinto no dentro de mucho. Los billetes de libras con el rostro del monarca Carlos III empezarán a llegar a mediados de 2024, tal y como ha detallado el Banco de Inglaterra esta pasada semana.
El retrato del Rey aparecerá en los cuatro billetes de polímero (5, 10, 20 y 50 libras). El resto del diseño de los billetes seguirá siendo el mismo. La imagen del Rey estará en el anverso de los billetes, así como en la ventana transparente de seguridad. Se puede comprobar la autenticidad de estos billetes del mismo modo que puede comprobar los billetes de este valor con la Reina Isabel II»
Cambiando de tercio, a territorio nacional, la firma de hipotecas avanza en octubre un 13,5% con el tipo fijo en mínimos anuales. La concesión de préstamos sobre viviendas registra su mejor octubre desde 2009, con más de 41.000 operaciones. La subida de los tipos de interés y la perspectiva de que seguirán al alza en el futuro está acelerando la firma de hipotecas, en un intento de evitar contratarlas aún más caras más adelante. Así, el número de hipotecas constituidas sobre viviendas aumentó en octubre un 13,5% respecto al mismo mes de 2021 y alcanzó las 41.022 firmas, la mayor cifra en un mes de octubre desde 2009, cuando se firmaron más de 52.000 hipotecas, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Con esta subida, superior a la del 4% registrada en octubre, la constitución de préstamos hipotecarios para casas suma 20 meses seguidos en tasas anuales positivas y acumula un repunte anual en lo que va de año del 12,9%.
Sin embargo, los portales inmobiliarios prevén una paralización en la concesión de hipotecas en los próximos meses por el alza del euríbor.
Yendo a lo que señalo en el titular del blog del día de hoy, el capital riesgo echa el freno en España y pone fin a su era dorada. La subida de tipos y la recesión obligan a cancelar las operaciones. En efecto, el capital riesgo está cambiando el paso. Tras una era en la que los grandes fondos reinaban en las operaciones en España, el sector encadena una sequía absoluta en los últimos meses que se prevé se mantenga durante los primeros meses del año que viene.
En esta semana también, el Senado aprobó definitivamente los impuestos a energéticas, banca y fortuna. La norma mantiene que el impuesto a la banca grave al 4,8% los intereses y comisiones de todas las entidades que facturen más de 800 millones en 2019, independientemente de su nacionalidad. A solo 10 días de expirar el año, el Senado dio su aprobación definitiva esta semana a la creación de los nuevos impuestos extraordinarios sobre las empresas energéticas, entidades financieras y grandes fortunas, lo que permitirá que estén en vigor el 1 de enero gravando ya el ejercicio 2022. La iniciativa, una proposición de ley impulsada por PSOE y Unidas Podemos, obtuvo finalmente el respaldo de 139 senadores, incluyendo a los socios de Gobierno, ERC, PNV o Bildu; el voto en contra de otros 107, y suscitó 12 abstenciones. El rechazo al veto del PP y las 72 enmiendas presentadas por los distintos grupos parlamentarios evitó la introducción de cambios de última hora, lo que hubiera exigido su remisión de vuelta al Congreso de los Diputados.
Estas Navidades se presenta con huelgas en las aerolíneas ‘low cost’. Desterrado la COVID como el fantasma de las navidades pasadas, el traqueteo de maletas volverá a resonar con fuerza estas fiestas en los aeropuertos de toda España. La mascarilla resiste como el único recordatorio de una pandemia que paralizó el mundo y que redujo a su mínima expresión el tráfico aéreo. Dos años después, las aerolíneas han recuperado prácticamente toda su operativa, sus ingresos vuelven a repuntar y los trabajadores que lo hacen posible aspiran -como en casi todos los sectores- a llevarse un trozo del pastel. Las convocatorias de huelga se han ido acumulando en torno a Navidad, Nochevieja y Reyes, atañen a diferentes aerolíneas de bajo coste, amenazan las vacaciones de miles de viajeros.
Tripulantes de cabina y pilotos de distintas compañías están llamados a la protesta durante las próximas semanas. Los motivos de cada conflicto son particulares, si bien el denominador común es que los empleados reclaman subidas salariales ahora que la tormenta covid ha amainado y el encarecimiento de precios merma su poder adquisitivo. Según las previsiones de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), las aerolíneas volverán a la senda de los beneficios en 2023, con unas ganancias en todo el sector de cerca de 4.500 millones de euros y unos 4.000 millones de pasajeros transportados en todo el mundo.
Solo queda esperar que estos conflictos no estropeen las vacaciones de muchos viajeros y, por mi parte, desearle una muy Feliz Navidad y todo lo mejor para 2023.
SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.