Los parches no funcionan

En esta semana se repetían las tensiones ante las caídas de volúmenes de gas de Rusia que llegan por el gasoducto Nordstream y que encendían las alertas de este riesgo. Rusia alega problemas técnicos, mientras Europa niega estas causas y ve que se está haciendo un uso político. A nivel de política monetaria, Lagarde confirmaba en una reunión con ministros de finanzas que están trabajando en un nuevo instrumento que prevenga de movimientos en la deuda de países «débiles» muy acusados o muy rápidos. Estas declaraciones y las expectativas de que definan la actuación de este programa en la reunión de julio impulsaban al euro, que recuperaba niveles de 1,05$/€.

Lo de que los parches no funcionan, según señalo en el titular del blog en el día de hoy, tiene que ver con que el precio de la luz sigue en ascenso y será un 2,8% más caro para clientes de tarifa regulada. El tope al precio del gas de momento no ha surtido efecto en la factura del consumidor. Esto es, las medidas que se están tomando resultan ser parches que no terminan de dar con la solución. En el mercado mayorista, la subida es del 4,15%, lo que suponen más de siete euros desde el día anterior, en el tercer día de aplicación de la denominada ‘excepción ibérica’ para topar el precio del gas natural para la generación de electricidad, acercándose a la cota de los 180 euros por megavatio hora (MWh).

En concreto, el precio medio de la luz el pasado viernes fue de de 177,90 euros/MWh, lo que supone 7,09 euros más que el precio actual (170,81 euros/MWh), según datos del Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE). No obstante, a este precio se le debe incorporar la compensación que pagará la demanda a las centrales de cogeneración y a los ciclos combinados. Este cargo, que se calcula de manera horaria, se ha situado en una media de 88,48 euros/MWh, frente a los 88,2 euros/MWh de ayer, teniendo que ser abonados por los consumidores beneficiarios de la medida, los consumidores de la tarifa regulada (PVPC) o los que, a pesar de estar en el mercado libre, tienen una tarifa indexada. Estos precios se están registrando, eso sí, en un contexto marcado estos días por la ola de calor y la elevada demanda, con una muy excepcional participación de las centrales de gas en la generación. El mecanismo ibérico, que recibió la luz verde de Bruselas finalmente la pasada semana, limita el precio del gas para la generación eléctrica a una media de 48,8 euros por MWh durante un periodo de doce meses, cubriendo así el próximo invierno, periodo en el que los precios de la energía son más caros. En concreto, la ‘excepción ibérica’ fija una senda para el gas natural para generación de electricidad de un precio de 40 euros/MWh en los seis meses iniciales, y posteriormente, un incremento mensual de cinco euros/MWh hasta la finalización de la medida. El Gobierno limitaba en sus cálculos a un 15,3% la rebaja en el recibo al consumidor de electricidad medio acogido a la tarifa regulada PVPC durante los 12 meses de aplicación del tope aprobado a la generación de electricidad a partir de gas natural, según consta en la memoria de impacto que acompaña el decreto ley.

Para el consumidor industrial, totalmente expuesto al precio ‘spot’, el Gobierno estimaba una rebaja de entre el 18% y el 20%, oscilando el primer mes del mecanismo entre el 15% y el 17%, y entre el 13% y el 15% en el último. Con respecto a hace un año, el precio medio de la electricidad  es un 91% más caro que los 93 euros/MWh del 17 de junio de 2021.

También, a nivel doméstico, señalar que la compraventa de viviendas sigue subiendo pero a menor ritmo. El número de operaciones subió un 11,9% en abril, hasta el nivel más alto en ese mes desde el 2008. La compraventa de viviendas subió un 11,9% el pasado mes de abril en relación al mismo mes de 2021, hasta sumar 47.349 operaciones, según los últimos datos dados a conocer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Durante los cuatro primeros meses del año se acumula una subida del 23,1 % respecto del mismo periodo de 2021, pero las 47.349 casas vendidas en abril suponen la cifra más baja desde octubre de 2021 y un 20,1 % menos que en marzo. Quizá es prematuro avanzar un ligero freno a la tendencia general, ya que el rosario de indicadores de transmisiones de viviendas por parte de inmobiliarias apuntan todavía a la situación de elevada actividad y de alza de los precios, en un contexto de incertidumbre pero confirmación de inminente subida de tipos de interés a partir de verano. Esa subida de tipos acelera operaciones en marcha, pero puede llegar a amortiguar el ritmo de crecimiento de las compraventas en un momento de oferta limitada de viviendas a la venta (especialmente en obra nueva). El indicador del INE es el nivel de compraventas más alto desde abril del 2008, cuando se superaron las 54.800 compraventas en ese mes. El incremento de operaciones se ha moderado en más de 13 puntos con respecto al crecimiento experimentado en marzo (+25,6%), pero son 14 meses consecutivos de subidas. De la nota del INE se constata que el alza interanual de compraventas fue consecuencia tanto del incremento de las operaciones en viviendas nuevas, que crecieron un 3,4%, hasta las 8.788 operaciones, como del aumento de la compraventa de pisos usados en un 14%, hasta sumar 38.561 transacciones. Según el INE, siete de cada diez compraventas de viviendas realizadas en abril (el 69,7%) se efectuaron entre personas físicas. En los cuatro primeros meses del año, la compraventa de viviendas ha aumentado un 23,1%, con avances del 26,3% en el caso de las viviendas de segunda mano y del 11,5% en las viviendas nuevas.

Malas noticias para la inflación: la mitad de las empresas subirá los precios en los próximos 12 meses. El 76,8% de las compañías encuestadas por el Banco de España prevé que la producción siga encareciéndose. Dos de cada tres firmas vaticinan tensiones en los costes laborales en un año. De acuerdo con la encuesta sobre la actividad empresarial (EBAE) que realiza el Banco de España, a lo largo del segundo trimestre del año se ha producido un aumento de la facturación de las compañías, si bien ligeramente inferior a lo estimado hace tres meses. Del análisis que ofrece la autoridad monetaria se hace patente la elevada heterogeneidad de la actividad por sectores. A la rama de servicios, que durante la pandemia fue la más castigada, le corresponde ahora ser la más beneficiada por la eliminación de las restricciones puestas en marcha frente al Covid. Es por ello por lo que a la hostelería, el transporte y el ocio, se suma el sector de la información y la comunicación, que ya experimentó un comportamiento positivo desde el inicio de la crisis sanitaria. En el otro lado de la balanza se encuentran la agricultura y las actividades administrativas. Sin embargo, el motivo de preocupación  viene de la variable de los precios, tanto por el lado de los costes de producción como de la salida de los productos acabados hacia la venta. Pese a que el momento más álgido de las presiones inflacionistas puede haber remitido, lo cierto es que la amplia mayoría de las compañías, en concreto el 76,8% del total, siguen manifestando una continuidad en los aumentos adicionales de los precios de sus inputs productivos en el segundo trimestre, si bien representa 5 puntos porcentuales por debajo de los registros del trimestre anterior.

Por ramas de actividad, la desaceleración de las presiones en los costes es generalizada, con la excepción de la construcción y la hostelería, donde se aprecia una nueva intensificación.

EVOLUCIÓN DE LOS MÁRGENES EMPRESARIALES

El informe trimestral publicado esta semana por el Banco de España pone de relieve cómo los márgenes empresariales experimentaron una elevada volatilidad durante la fase más aguda de la pandemia, mostrando un ligero repunte a lo largo de la primera mitad de 2021 para contenerse en la segunda, a medida que se intensificaba el repunte inflacionista. A finales del año pasado los márgenes empresariales estaban unos 3 puntos porcentuales por debajo de los niveles previos a la pandemia, más que la brecha de otros países del euro. En otro orden de cosas, el transporte aéreo de pasajeros sufre su mayor aumento de precio en 13 años. Los precios suben un 8,5% en el primer trimestre, un dato inédito desde el mismo periodo del año 2009. Los precios del transporte aéreo de pasajeros subieron un 8,5% en el primer trimestre respecto al mismo periodo de 2021, registrando así su mayor repunte interanual desde el primer trimestre de 2009, según señala el Instituto Nacional de Estadística (INE). De las quince actividades del sector servicios para las que el INE calcula índices de precios, dos de ellas recortaron su tasa de variación interanual en el primer trimestre y trece la aumentaron. Así lo revela el Índice de precios del Sector Servicios, cuyo objetivo es facilitar trimestralmente índices de la evolución del precio de los servicios proporcionados a empresas por cada uno de los sectores desde el punto de vista del productor.

Y cierro con una buena noticia, para variar. Educación, informática y sanidad tienen 345.000 ocupados más que antes de la crisis. La Seguridad Social tiene 630.000 afiliados más que antes de principios de marzo de 2020, cuando estalló la pandemia mundial de Covid. La Seguridad Social va a terminar el mes de junio con 630.000 afiliados más que justo antes de la pandemia, en febrero de 2020, según la serie depurada y corregida del efecto estacional. Este es uno de los cálculos facilitados esta semana por el ministro de Inclusión, José Luis Escrivá, durante la presentación de las cifras de afiliación de junio, que adelanta habitualmente a mediados de mes. Según estas cifras, el empleo sigue en racha, eludiendo el impacto del encarecimiento de la energía y el alza de precios en general, así como el resto de efectos derivados de la guerra en Ucrania. Solo en junio, el sistema sumará otros 120.000 nuevos cotizantes. De hecho, el miércoles de esta pasada semana, el número total de afiliados se anotó otro récord al superar los 20,4 millones de trabajadores. Aunque, sin desmerecer este dato de junio, Escrivá, hizo hincapié en la cifra que mide la afiliación de manera desestacionalizada –ya que depura los efectos del calendario y refleja mejor la tendencia del empleo– y que muestra que al final de junio el sistema tendrá 85.000 cotizantes más. Se trata, según insistió el ministro, de la mejor cifra desestacionalizada en cualquier mes de la serie histórica con la excepción de junio de 2005 (cuando se produjo la regularización extraordinaria de más de 700.000 inmigrantes) y en ese mes de 2021, condicionada entonces por el impulso generado por la salida de la crisis del Covid.

Evidentemente, todo lo que siga en esta línea es positivo para la economía española.

  SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIGE.