Enfocando un otoño caliente

Ha sido la pasada una semana de bajadas generalizadas en las bolsas mundiales y ha estado marcada por la crisis energética, los malos datos macro en Asia y los mensajes de dureza monetaria en los bancos centrales, cuando el presidente de la FED anunciaba la necesidad de subir los tipos por encima del 3,5% y mantenerlo a ese nivel durante 2023 y ante las expectativas también de subida de tipos del BCE en la reunión del próximo jueves. En cuanto al IBEX 35, cierra la semana con una caída del 3,1%. Por sectores europeos, destacan las caídas en Ind. Básica (-7,7%) y Tecnología (-6,1%), mientras que el sector automovilístico era el único que se resistía a la tendencia y termina la semana en subidas (+0,9%)

A nivel de política monetaria, cabe comentar la actuación de los bancos centrales. Mientras la FED sigue marcando el paso del mercado, el próximo jueves se reunirá el BCE, donde tendrá una nueva difícil comparecencia. La escalada de precios y la retórica de muchos miembros del Consejo han preparado al mercado para un nueva contundente subida de 75pb. Para calibrar los siguientes pasos en esta área, será clave ver las proyecciones de inflación de medio plazo que actualice en la reunión el staff, así como la marcha de las negociaciones salariales del último trimestre de este año.

Es más, el BCE apuesta por subir los tipos de forma «constante».  El economista jefe del organismo afirma que de esa forma se podrán hacer «correcciones a mitad de camino» si es necesario.

Así se ha expresado Lane, que fue gobernador del banco central de Irlanda  entre 2015 y 2019, en una mesa redonda celebrada en el marco del encuentro anual organizado por la Asociación de Investigación de los Bancos Centrales (CEBRA, por sus siglas en inglés), que en esta ocasión tiene lugar en la Universidad Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona. El BCE, en un contexto de elevada inflación como consecuencia de la guerra de Ucrania y los coletazos de la pandemia, ha aprobado, de momento, una subida de tipos de medio punto, hasta el 0,50%, la primera en once años. Lane, que entre 2015 y 2019 fue gobernador del Banco de Irlanda, no ha dado su opinión sobre eventuales subidas de tipos en las próximas fechas, pero sí se ha mostrado partidario de que los cambios sean graduales. Ha señalado que «los riesgos al alza para la inflación son actualmente más intensos que los riesgos a la baja», pero ha alertado de que la situación podría cambiar, dado que el crecimiento de la inflación está ligado principalmente al encarecimiento de los precios de la energía. 

Por otro lado, Bruselas estudia limitar el precio de gas y renovables. En efecto, como titulo en el blog en el día de hoy, el otoño-invierno se presenta complicado. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, presentará la batería de opciones de emergencia en el debate sobre el estado de la unión del 14 de septiembre.

La Comisión Europea ya no esconde su preocupación por la situación del mercado energético europeo y la escalada de precios. “Es obvio que es muy difícil”, ha admitido esta semana la subdirectora general de energía, Mechthild Wörsdörder, ante la comisión de industria y energía del Parlamento Europeo. Una situación a la que Bruselas responderá con una nueva batería de propuestas que la presidenta Ursula von der Leyen detallará, según ha anunciado, durante el debate sobre el estado de la unión, el próximo 14 de septiembre en Estrasburgo. Sobre la mesa, topes de precios para quienes producen electricidad a partir de otras fuentes distintas al gas, como las renovables o la energía nuclear, medidas para reducir la demanda de electricidad o el uso de los beneficios extraordinarios de las eléctricas para ayudar a los consumidores más afectados. Según Bruselas, el límite de precios inframarginales daría a los Estados miembros recursos financieros para financiar las intervenciones en los precios minoristas y daría una mayoría de certidumbre legal para proteger a determinados colectivos afectados por el impacto de los elevados precios de la electricidad a través de la tarifa regulada. La Comisión también considera que la intervención solo tendrá éxito si además se produce una reducción en la demanda de electricidad que ayude a mitigar la presión de los precios. Bruselas es consciente de que el riesgo de corte total en el suministro es “fuerte” ya que cada vez son más los Estados miembros afectados por el corte parcial o total en el suministro. Esta semana sin ir más lejos Gazprom ha decidido suspender el envío de gas a través del gasoducto Nord Stream 1, que lleva el combustible fósil a Alemania, alegando necesidades de mantenimiento. “Hay peligro de que haya cortes de suministro. La situación es difícil y hay países que pueden verse afectados”, ha avisado la subdirectora general de energía. Como nota positiva, el hecho de que las reservas europeas ya están al 80% con dos meses de antelación. Bruselas, no obstante, insiste en que los Estados miembros tendrán que seguir llenando los depósitos y que para afrontar el próximo invierno con garantías en marzo de 2023 tendrán que llegar al menos 40%. “Hay que tener en cuenta no solo este invierno sino también los siguientes”, ha dicho Wörsdörfe.

En otro orden de cosas, Alemania, Italia y Japón alcanzan por primera vez su nivel de PIB pre-Covid. España aún no alcanza el crecimiento de 2019, lo cual, evidentemente, no son buenas noticias.  La mejor evolución es para Italia, que registró en el segundo trimestre de este año un crecimiento acumulado del 1%. El repunte del país asiático ha sido un poco más modesto: de apenas el 0,2%, lo suficiente para dejar atrás los golpes económicos asestados por la pandemia. El caso alemán fue el peor, pues se quedó igual que en el último trimestre de 2019. En cualquier caso, la positiva evolución de estos tres países ha contribuido a que el G7 se anote un aumento del 1,9% respecto a hace dos años y medio. España, por contra, aún se mantiene por debajo de los niveles pre-Covid.

A nivel domestico cabe destacar que la luz ya es un 50% más cara por las noches por el golpe de la subida del gas. El precio de la electricidad se dispara de madrugada más que por el día por el mayor uso de gas para producirla y el coste de la compensación a las eléctricas por la excepción ibérica. La espiral de subidas  sigue agravándose. Agosto se ha convertido en el mes con la electricidad más cara de la historia y el mayor desde que se aplica la famosa excepción ibérica que no está impidiendo que la energía siga subiendo pero sí consigue que la subida sea mucho menor que la que sufrirían los consumidores si no se hubieran adoptado esas medidas.

Cambiando totalmente de tercio, informarle, por si no lo sabe, de que se puede desgravar si usted ha sido víctima de un fraude con criptomonedas. La Dirección General de Tributos se abre a considerar los fraudes con monedas virtuales como pérdidas patrimoniales en el IRPF fijando un criterio vinculante en el que no basta con una denuncia ante la Policía sino que se exige tener avanzado un litigio judicial. Así como el reclamo de beneficios exponenciales a la inversión que viene acompañando al pujante mercado de las criptomonedas ha atraído a millones de inversores de todo el mundo, la apertura de este mercado al público masivo ha multiplicado los casos de fraudes, por lo que esta opción parece de lo más interesante.

Una mala noticia en el ámbito empresarial: el índice de confianza empresarial sigue degradándose en España. El dato de agosto del 6,1 negativo frente al 5,2 de hace un mes indica un empeoramiento de las previsiones de inversión. El índice mencionado se ha situado en el 6,1 negativo a finales de agosto frente al 5,2 de hace un mes, según informó esta semana el  INE.  El índice de Confianza en Negocios mide las condiciones para realizar actividad empresarial en nuestro país. Contribuye al análisis de la situación económica en el corto plazo. Una tendencia alcista indica aumento en inversiones empresariales, lo que puede dar lugar a mayores niveles de producción. Una lectura mayor de lo esperado debería ser tomada como positiva/alcista para el euro, mientras que una lectura inferior a lo esperado debería ser tomada como negativa/bajista para la moneda única. El índice 6,1 negativo muestra el pesimismo empresarial existente en agosto y la posibilidad de que las inversiones se vayan a reducir en los próximos meses.

Por su parte, Calviño sugiere un alza salarial moderada para los empleados públicos para frenar la inflación. La propuesta del Gobierno podría partir de un incremento de alrededor del 3%, un porcentaje similar al de la inflación prevista para el próximo año. La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, se desmarcó de las declaraciones de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, apoyando explícitamente que los sindicatos salgan a la calle para protestar contra la negativa de la patronal CEOE a subir los salarios. Calviño rechazó por tanto respaldar la postura de Díaz, al tiempo que destacó que “los agentes sociales se han comportado con enorme responsabilidad” y confió en que ese clima siga “y todos estén a la altura de las circunstancias”, y que también salga adelante el pacto de rentas que respalda el Gobierno entre sindicatos y patronal. “La prioridad de todos tiene que ser contener la inflación”, remarcó, “y es evidente que la moderación tanto de los salarios como de los márgenes empresariales es clave para evitar entrar en una espiral inflacionista que haga que esta inflación persista en el tiempo”. Al menos, se escucha algo con sensatez viniendo del gobierno.

Por su parte, Montero, se muestra «convencida» de que habrá nuevos Presupuestos en 2023.

La ministra critica al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, «por abrir el curso político hablando de impuestos» y la conveniencia de bajarlos. La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, se declaró  «convencida» de que el proyecto de ley de Presupuestos de 2023 contará con un respaldo parlamentario suficiente para ser aprobados. «Éramos optimistas al comienzo del verano, hemos trabajado en un primer momento con Unidas Podemos como socios de coalición, y ahora con el resto de grupos, y estoy convencida de que el país tendrá unos nuevos Presupuestos en 2023«, afirmó la vicesecretaria general del PSOE en declaraciones a los medios.  Montero señaló que unas nuevas Cuentas del Estado son «necesarias» para «afrontar con mayores garantías el invierno», que presagia ser «complejo y duro en Europa y España» por «el incremento del precio de la vida que están viviendo los ciudadanos cada día» a causa de la invasión de Ucrania. «Somos conscientes de ello, y espero que sigamos creando empleo como hemos hecho hasta la actualidad», remarcó la titular de Hacienda. La ministra criticó al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, «por abrir el curso político hablando de impuestos» y la conveniencia de bajarlos. La dirigente socialista lamentó la falta de respaldo del PP en el Congreso al último paquete de medidas presentado por el Gobierno.

En otro tono, otra parte del gobierno actúa de la manera sabida, como si de una campaña electoral se tratase. De hecho, Trabajo se prepara para pelear una fuerte subida del salario mínimo. Solo cumplir el compromiso de elevar esta renta al 60% del salario medio exigiría subir el SMI casi un 8%, en línea también con la inflación media anual prevista

La comisión de expertos que estudia cuánto y como debe subir el salario mínimo interprofesional (SMI) se reunirá el próximo viernes, día 2. Su trabajo será estudiar las distintas variables a tener en cuenta para subir esta renta en 2023, sobre todo, con el objetivo de que el Gobierno cumplan con su compromiso de elevarlo al 60% del salario medio en esta legislatura, a la que solo le queda un año. La primera de las claves es concretar cuál es el salario medio para saber a qué cuantía se debería llegar como mínimo para cumplir con la promesa del Gobierno de coalición. Y, si este grupo de expertos mantiene las fuentes utilizadas para sus anteriores informes, esa ganancia media se medirá con los datos de la Encuesta Anual de Estructura salarial (que mide las retribuciones de la industria, la construcción y los servicios). Los últimos datos que usaron los expertos para recomendar una senda de incremento del SMI fueron los de 2018, según los cuales en 2023 el salario mínimo tendría que situarse en 1.049 euros al mes en 14 pagas (14.686 euros anuales). Eso exigiría un incremento de la actual cuantía (1.000 euros al mes, 14.000 anuales) del 4,9%. Pero en el Ministerio de Trabajo, distintas fuentes consideran que esta cuantía fijada por los expertos en junio de 2021 es demasiado baja, precisamente porque para llegar a ella se usó el dato de salario medio de 2018 “que ha quedado totalmente desfasado”, indican, al tiempo que apuestan porque se utilicen los datos más actualizados. Así, después de esa encuesta, el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha publicado otras dos: la de 2019 y la 2020. Sería, por tanto, esta última, la más actualizada como referencia del salario medio. El incremento del SMI por el que podría apostar de partida el Ministerio de Trabajo rondaría el 8%; si se tiene también en cuenta que el incremento del 10% hasta los 1.100 euros al mes exigido también esta semana por el sindicato UGT es visto como demasiado alto. No obstante, para poder arrancar las negociaciones con propuestas de incremento del salario mínimo en el entorno del 8% Díaz tendrá que salvar primero algunos obstáculos internos, fundamentalmente los del Ministerio de Asuntos Económicos, liderado por la vicepresidenta primera y ministra del ramo, Nadia Calviño, cuyo rechazo a fuertes aumentos de esta renta es públicamente conocido. Todo apunta, por tanto, a que podría reeditarse la lucha interna protagonizada por Díaz y Calviño y sus respectivos equipos en anteriores negociaciones para incrementar esta renta en las que suele salir ganando la titular de Trabajo.

Cierro con una noticia y recomendación que tal vez desconozca. Es probable que nunca haya oído hablar de ello, pero, efectivamente, existe un límite legal de cantidad en efectivo que se puede llevar por la calle. Este tope está fijado en la Ley 10/2010, publicada el 28 de abril de ese año. El objetivo de esta normativa es reducir el blanqueo de capitales, así como la financiación del terrorismo. Para ello, una de las medidas que se implementan es la instauración de un máximo de dinero físico que se puede llevar por la calle. Dicha cifra son 100.000 euros dentro de España. Sin embargo, si se quiere cruzar una frontera y entrar a otro país, aunque sea del Espacio Schengen, la cantidad máxima son 10.000 euros. En cualquiera de los dos casos, si se supera habrá que cumplir con los trámites legales correspondientes, así como declarar la cantidad. Para realizar una compra en efectivo, sin embargo, el límite está en 1.000 euros, de lo contrario habrá que recurrir a otro método de pago. En los últimos años, el uso de dinero en efectivo prácticamente se ha extinguido. Los pagos con tarjeta se han convertido en la opción preferida de la mayoría de españoles que han ido abandonando sus visitas a los cajeros automáticos. Por este motivo, cuando sacamos dinero en metálico del banco, es importante llevar un control que llega por parte de Haciendo con el objetivo de combatir el fraude fiscal. Para ello, impone un máximo de dinero que nos permite retirar en un día. Cada entidad bancaria fija un límite de dinero que los clientes pueden retirar por día del cajero automático. La cifra varía dependiendo del banco, pero suele establecerse alrededor de los 600 euros aunque, este límite puede ser modificado por el usuario según sus preferencias, pero siempre dentro de la horquilla que permite la ley. Estas medidas de seguridad tienen como objetivo perseguir el blanqueo de capitales, lo cual es de lo más lógico y racional.

 SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.