Nuevo récord negativo de deuda pública: 1,5 billones de euros

La pasada semana, los índices de renta variable europeos presentaban ligeras subidas generalizadas (Eurostoxx +1,4%) si bien los índices americanos presentaban ligeras bajadas (Dow Jones 0,0%, S&P 500 -1,2%, Nasdaq C. -1,6%). Cabe destacar los datos de los resultados del sector Retail de EEUU que mantenían el mensaje tranquilizador sobre la fortaleza de la demanda, así como los datos de ventas al por menor, que aumentaban más de los esperado en octubre. En relación con la situación geopolítica, se puede hablar de un escenario más relajado tras la condena intensa a la guerra de Ucrania por parte del G-20, donde se especificaba el rechazo a la amenaza nuclear. Por último, la FED aboga por subidas de tipos más ralentizadas a partir de diciembre, aunque considera que más subidas son necesarias para estabilizar la inflación.

Un tema candente y preocupante: se ha dado la tormenta perfecta que ha hundido al bitcoin y a las criptomonedas.  El cambio de panorama inversor tras la subida de tipos coge a algunos en caída libre. El mundo cripto ha perdido el favor: en lo que va de año el rey bitcoin cede el 65% -el 75% desde máximos- y lo mismo ocurre en el resto de principales alternativas. Con el riesgo y volatilidad que le acompaña, ¿por qué jugarse los ahorros ahí si opciones más seguras como la renta fija que ya empiezan a tener atractivo? Los desplomes vienen por varios frentes. Las criptomonedas se dispararon al calor del dinero barato y exceso de liquidez, con récords hace justo un año. Además, mientras que en la pandemia había un ahorro inesperado que muchos volcaron en el mercado de las criptomonedas, la inflación ha dejado a otros tantos sin margen.

Pasando al ámbito bancario, tampoco hay buenas noticias. La mayoría de la gran banca ya vende las hipotecas fijas por encima del 4%. Buena parte de las entidades tienen estos contratos por encima de los variables. Era una dinámica inevitable. Conforme el euribor ha ido escalando desde los terrenos negativos en los que cotizaba en marzo de este año hasta cerca del 3% en que se encuentra ahora, las entidades financieras han ido virando su política comercial en la financiación a la vivienda.

Subida de tipos

Cuando los tipos estaban en el cero por ciento y los márgenes por intereses estaban derrumbados, los bancos impulsaban a sus clientes a contratar hipotecas fijas con el reclamo de que se blindaban ante posibles subidas del precio del dinero con un interés más elevado que el variable -en torno al 2%- pero permanente a lo largo de la vida del crédito. Ahora que el Banco Central Europeo (BCE) está subiendo los tipos (están ya en el 2%) y todo indica que seguirá en la misma línea hasta contener la inflación, las variables son más rentables para los bancos. De ahí que premien este tipo de contratos y encarezcan los fijos, que en apenas diez meses han duplicado su coste.

Por otro lado y siguiendo con el tema bancario, el Banco de España pide centrar las ayudas en los hipotecados más vulnerables. El gobernador pide «calibrar» bien las medidas para que no afecten a la estabilidad financiera. Pablo Hernández de Cos, ha defendido una calibración correcta del ámbito de aplicación del plan de ayuda a los hipotecados en problemas por la escalada del euribor que negocian desde hace semanas el Gobierno y la banca con el asesoramiento de su organismo. «En este contexto, la política fiscal debe ser muy focalizada en los colectivos más vulnerables. Esto también aplica a este tipo de medidas», ha sostenido. El Ejecutivo ha dado de plazo al sector hasta el final de la semana para llegar a un acuerdo y que las medidas entren en vigor el 1 de enero.

En el ámbito empresarial, Virginia Guinda afirma que el Gobierno, con su actitud, arrincona a los empresarios y es inadmisible. Afirma que subir  los impuestos a la banca y a las eléctricas puede tener eco electoral, pero las empresas energéticas pueden trasladar sus inversiones fuera de España. Virginia Guinda, (Barcelona, 1974) ha desembarcado en Madrid en las últimas semanas para preparar su campaña a las elecciones de CEOE del próximo día 23, en las que compite con el actual presidente, Antonio Garamendi, que aspira a un nuevo mandato.

Yendo al titular que destaco en el blog en el día de hoy, se ha dado una pésima noticia: la deuda pública registra nuevo récord en septiembre con más de 1,5 billones de euros. Así, la deuda de la Seguridad Social se situó en 99.192 millones, un 7,9% más que hace un año. Y volvió a registrar un nuevo récord durante el mes de septiembre, superando los 1,5 billones de euros por primera vez en la historia, según datos publicados esta semana por el Banco de España. El volumen aumentó en 71.715 millones frente a los 1,432 billones existentes en septiembre del año pasado, lo que se traduce en un incremento interanual del 5%. En términos intermensuales, la deuda se incrementó en 12.609 millones en comparación con agosto (1,491 billones). Por administraciones públicas, la administración central copa el mayor volumen, con 1,329 billones o el 88,3% del total. Su saldo se incrementó en 15.224 millones o en un 1,1% frente al cierre del agosto, y engorda en 84.331 millones en comparación con septiembre del pasado año, cuando se situaba en casi 1,244 billones (+6,7%). Por su parte, la deuda de la Seguridad Social se situó en 99.192 millones, ocho millones más que en el mes anterior. En comparativa anual creció un 7,9% o en 7.337 millones frente a los 91.855 millones que tenía en septiembre del pasado año.

A nivel de mercados financieros, señalar que las empresas congelan las salidas a bolsa y entran en fase defensiva. Las ofertas de suscripción de acciones caen un 96% y las emisiones de deuda, un 62%. De hecho, la última gran salida a Bolsa fue la de Acciona Energía. Y es que la invasión rusa de Ucrania y la escalada de la inflación obligaron a las empresas españolas a cambiar bruscamente de estrategia en el primer semestre del año y a congelar salidas a bolsa, ampliaciones de capital y emisiones de bonos, según el informe que ha presentado esta semana la Asociación de Mercados Financieros de Europa (AFME) en Bruselas. Los datos son hasta junio, un mes antes de las primeras subidas de tipos del BCE, y llegan tras dos años de amplia liquidez y facilidades de financiación. Las empresas se ponen ahora a la defensiva y dejan de acudir en busca de recursos a los mercados, bastante menos receptivos por la elevada incertidumbre. El informe muestra que en el primer semestre las emisiones de acciones en los mercados de capitales cayeron un 96%. Aquí se incluyen las salidas a Bolsa, en las que se han frustrado varios planes, como el de Ibercaja, que canceló su proyecto de cotizar tras varios aplazamientos. La antigua caja estaba valorada entre 1.650 millones y 2.100 millones de euros. La tendencia es parecida en Europa, donde las salidas a Bolsa pasaron de mover más de 48.000 millones en el primer semestre de 2021 a apenas 4.200 millones en 2022. La caída es del 91% y coincide con aplazamientos sonados en EEUU, como los WeTransfer o WeWork. En España, este año no ha habido estrenos bursátiles ni en el Ibex ni en el Mercado Continuo. En 2021 salieron a cotizar Acciona Energía y Ecoener, pero ya se suspendió algún proyecto como el de Primafrio o el de Opdenergy.

En cuanto al inevitable tema de la inflación, algunos de los 20 alimentos básicos de la cesta de la compra suben hasta el 43% en octubre. El azúcar lidera con un alza del 42,8%; la leche, el 25,6%, y los huevos, el 25,5%. Por contra, los salarios en convenio, el 2,64%, 4,66 puntos por debajo del IPC. El grupo de los alimentos se ha erigido en el principal factor inflacionista en el IPC y está siendo decisivo a la hora de fijar una seria resistencia para que los precios se moderen, una vez que el componente energético cede tras las tensiones registradas por efectos de la guerra de Ucrania. Los precios de los alimentos suben un 2,3% en el mes, pero arrojan un fuerte incremento del 15,4% en términos interanuales, el nivel máximo desde que empezó la serie histórica en enero de 1994. Según se desprende de una selección de los 20 alimentos básicos que componen la cesta de la compra de una familia media española, los precios registran preocupantes incrementos en muchos de esos alimentos de primera necesidad. El precio del azúcar lidera este ranking con un incremento interanual del 42,8%, mientras que las harinas y otros cereales registran el 37,8%.  También resulta preocupante el hecho de que estos incrementos a quien más afecta es a las familias con menor nivel de renta, que están sufriendo un importante recorte en su poder adquisitivo, por lo que en muchos casos deben emplear parte de su ahorro acumulado durante la pandemia para continuar con su nivel de consumo previo a este repunte inflacionista.

Malas noticias fiscales: con el nuevo impuesto que tendrás que pagar a partir de enero y que te quitará unos 5 euros al mes. El 1 de enero entrará en vigor el Mecanismo de Equidad Intergeneracional, que pretende llenar la hucha de las pensiones.  Tanto si eres autónomo como empleado deberás pagar un nuevo impuesto a partir de 2023. Se trata del El Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), un nuevo impuesto que deberán pagar, a partir del 1 de enero de 2023, todos los trabajadores que se encuentren dados de alta en la Seguridad Social y que supondrá un porcentaje del salario. Una medida que afecta a más de 20 millones de ciudadanos españoles.

¿Qué es el MEI? El nuevo impuesto que llega en 2023

El Mecanismo de Equidad Intergeneracional sustituye al antiguo Factor de Sostenibilidad y es contingente y temporal. Este impuesto tiene como objetivo volver a llenar la hucha de las pensiones mediante el reparto equilibrado entre generaciones del esfuerzo para financiar las pensiones. Con el envejecimiento de la población en niveles disparados, el paro actual, la inminente jubilación de la generación del baby boom y el fondo de reserva de las pensiones prácticamente vacío, el Gobierno prevé la llegada de tiempos muy difíciles para las pensiones.

Cómo será el nuevo impuesto del Mecanismo de Equidad Intergeneracional

El MEI que llegará en enero de 2023 no afectará a las pensiones, por lo que no se reducirá el importe de las mismas, a diferencia del derogado Factor de Sostenibilidad. Se trata de un nuevo impuesto que será asumido por todos los trabajadores independientemente de sus ingresos. Es decir, el porcentaje sobre el salario será el mismo para todos.

En cuanto a la evolución de nuestro país, siguen las malas noticias: la UE confirma el frenazo de España: el crecimiento del PIB pasa del 1,5% al 0,2%. El PIB de la zona euro también frenó su expansión entre julio y septiembre al 0,2% desde el 0,8% del segundo trimestre. La economía española no se encuentra en su mejor momento. Así lo han confirmado varios organismos. No habrá que esperar a 2023 para comprobar que el país se encuentra ante un escenario convulso, ya que el producto interior bruto (PIB) español ya frenó su ritmo de expansión en el tercer trimestre al 0,2% desde el 1,5% de los tres meses anteriores, según datos publicados  por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.

Finalmente y en relación al paro de transportistas que arrancó con una manifestación por el centro de Madrid, decir que los convocantes concentran sus fuerzas en una movilización en la capital de España y apelaron a agricultores, ganaderos y hosteleros a unirse a la misma. A nivel local, en el Principado de Asturias, apenas ha tenido seguimiento.

SUSANA ÁLVAREZ OTERO ES PROFESORA TITULAR DE ECONOMÍA FINANCIERA Y CONTABILIDAD DE LA UNIVERSIDAD DE OVIEDO E INVESTIGADORA VISITANTE DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE.